Micrófono invisible activado
La IA ya capta tu habla interna; la pregunta es quién apaga
Imagina un debate en México donde, además del guión, podamos ver el intento de decir la verdad. El 8 de septiembre de 2025, AlterEgo, empresa surgida del MIT, mostró un dispositivo que te pones (sin cirugía) y que convierte señales de los músculos del habla, antes de hablar, en palabras.
Te responde por vibración en el hueso del oído, no “lee mentes”; detecta lo que ibas a decir un instante antes, es una gran ayuda para quien perdió la voz y bien usado, puede hacer más difícil mentir en público.
La idea no es espiar, es dar cuentas. Imagina a cada político activando un “micrófono previo” voluntario al responder. No sabremos su mundo privado, pero sí, si formó internamente una frase distinta a la que dijo. Eso cambia el teatro, menos maquillaje, más congruencia.
Para que funcione sin abusos, tres reglas básicas: permiso claro y cancelable; revisiones técnicas hechas por terceros; y un botón físico para apagarlo al instante, en la oreja y bajo control del usuario. Sin esas reglas, mejor ni prenderlo.
¿Riesgos? Varios. Puede fallar, sesgar o terminar en manos de un gobierno autoritario, por eso, orden antes que reflectores, pruebas independientes de precisión, registro de errores y castigos si alguien intenta usarlo sin permiso.
Primero clínicas y después el espectáculo, el orden importa, el punto no es oír “lo que piensan”, sino saber lo que estaban por decir y en un país donde lo que no se dice duele más que lo que se dice mal, abrir ese pequeño espacio “con garantías” ya sería avance suficiente para mover la aguja.
No asusta lo que el aparato oye; asusta quién decide cuándo nos apaga.