No dones: Invierte en tu propio rescate
La empatía no se mide, se comparte
A veces creemos que la vida nos ha dado un seguro invisible, una distancia cómoda entre nosotros y esas realidades que vemos por televisión: niños en rehabilitación, familias que dependen de un CRIT, el Teletón pidiendo un granito de ayuda. Pero hoy, no vengo a hablarte como un buen samaritano, ni a darte un discurso cursi; vengo a recordarte una verdad tan simple como cruda: TODOS estamos a un mal paso de necesitar lo que hoy nos parece ajeno.
No hay que hacer cuentas ni medir la generosidad con la calculadora. El Teletón 2025 no es solo una cifra que se alcanza o no se alcanza; es un recordatorio de que la empatía no tiene licencia de autor. Hoy tú y yo podemos movernos sin dolor, sin necesidad, sin urgencia, pero estamos a un volantazo, a un resbalón del azar, a un momento de la vida en el que podríamos necesitar ese mismo apoyo que hoy pedimos para otros.
Así que, sin rodeos: reenvía este texto. Cópialo, pégalo, compártelo en tu chat sin mi nombre; no es promoción para mí, es una invitación a que todos entendamos que la solidaridad es un espejo. Hoy ayudas, mañana podrías ser tú quien reciba. Y cuando llegue el sábado, si hemos logrado que aunque sea una persona más entienda que el Teletón no es un evento ajeno, sino una red que todos podríamos necesitar, habremos hecho algo que vale más que cualquier cifra.
Nos vemos en el espejo de la empatía.
TELETÓN 2025, Sábado 11 DE OCTUBRE DE 2025
